Con una inflación que se estima que llegara al 1,7% para este mes y teniendo en cuenta la liberación de los precios en las naftas sumado al aumento de las tarifas públicas que vendrán, la proyección acerca de la suba de precios para los últimos 3 meses del año indica que la inflación no va a bajar.

A la suba del combustible y las tarifas, hay que agregar el aumento en los servicios de telefonía celular, las prepagas y los taxis. De esta forma, la inflación de noviembre podría mostrar alza y cerrar en el 1,7 por ciento.

Tras el aumento de la nafta en el mercado mayorista, se descuenta que llegará luego el ajuste a los surtidores y eso ya es sólo cuestión de tiempo. Por eso, en la cadena del transporte de cargas ya hacen cálculos: cuando rija el nuevo precio en los surtidores, el costo logístico podría aumentar hasta un 5%, según fuentes del sector.

“Hoy el combustible representa cerca de un 35% de los costos totales de transporte de larga distancia”, apunta Juan Aguilar, secretario de Relaciones Institucionales de Fadeeac, organismo que nuclea más de cincuenta cámaras de transporte de todo el país. Los camiones son los mayores consumidores de gasoil en el mercado, con una participación cercana al 50% del consumo interno.

La suba del 11,5% en el mercado mayorista anunciada, por sí sola ya afecta los costos de transporte. El Índice Nacional de Costos Logísticos, en el acumulado de enero a agosto, refleja este año un aumento de 14,46%. Aguilar calcula que el costo total del transporte puede aumentar, tras esta suba, entre 4% y 5%.

El Gobierno nacional prevé una batería de incrementos que comenzaron a aplicarse a partir de octubre y continuarán hasta fin de año. Se trata de los servicios públicos, las prepagas, la telefonía móvil, combustibles y el transporte público, entre otros.

El boleto de tren y colectivo podría llegar a los 11 pesos. Por eso, el Gobierno nacional planea el lanzamiento de un pasaje “multimodal”. Funcionaría con una tarifa plana de 10 pesos para la combinación de ferrocarriles, subtes y transportes urbanos.

“En el caso del transporte hay un conflicto porque las empresas están pidiendo un alza salarial del 50 por ciento, pero a la vez se les va a quitar la ayuda del Estado, por lo que la suba será del 70 por ciento” y agregó: “La nafta y los transportes de media y larga distancia van a continuar su escalada según se viene anunciando, lo que afectará también a los transportes alimenticios”.

Con esta visión de futuro, el kiosquero esta muy preocupado, ya que el cigarrillo y las golosinas, no se apartan de estos aumentos y el consumidor cada día analiza y valora su decisión en función de su presupuesto de bolsillo.

Como ultimo recurso, el consumidor se dar cuenta que esta haciendo un cambio, trabajo, salario por subsistencia y en esta ecuación, el vicio y los pequeños placeres, no están siendo tenidos en cuenta.

POR TODO ESTO AMIGO KIOSQUERO, LE ACONSEJAMOS ESTE ATENTO A LOS MOVIMIENTOS DE PRECIOS, QUE SI NO SE DA CUENTA, LO VA A DEJAR MAL PARADO.